Margarita Calderón Sabemos que hay muchas personas a las que no les gusta la lectura, este hábito ha ido desapareciendo, ya sea por la creación de las nuevas tecnologías de la información y de la comunicación, u otros elementos.
Hay algunas personas que hacen de lado a la lectura, porque nunca disfrutaron un texto durante su instancia académica, porque esta demandaba mucho esfuerzo o simplemente por falta de tiempo. Lo cierto es que la lectura es un elemento fundamental en el aprendizaje cognitivo del ser humano, y aunque la tecnología, de cierta manera ayuda a facilitarnos información a través de sitios web, los libros siempre van a tener más beneficios ya que la información siempre va a ser mayor, y allí estimulamos la concentración, la percepción, la empatía, no nos deteriora la visión y agudiza la astucia mental.
¿Cómo puedes cogerle amor a la lectura?
Lo primero que debes hacer es dejar de ver a la lectura como una obligación, en la universidad siempre solemos leer textos educativos, académicos o de información acerca de temas de actualidad. Hay artículos científicos que demuestran que sólo el 5% de estudiantes universitarios leen por gusto, el otro 95%, realiza lecturas por obligación y de cierta manera, realizar acciones de esta forma, hace que nosotros cojamos desganas.
La segunda parte de lo que debes hacer es reflexionar acerca de lo que quieres aprender a través de la lectura, buscar textos que tengan relación con esos temas e identificar tu género literario favorito.
Tercero, haz conexiones entre la lectura y otros intereses. Cuarto, deja de leer los textos que no te gusten si sientes apatía por cierto escritor o cierto tipo de lectura.
Quinto, realiza una rutina de lectura dependiendo de los espacios libres que tengas. Hay algunas personas a las que les gusta leer en la noche, otras a las que les gusta en el día, ya dependerá de ti la forma en la que manejes el tiempo.
Y finalmente, sexto, visita espacios de lectura como: librerías, clubs de lectura y socializa en torno a los textos con otras personas.
Con paciencia y objetividad, lograrás ser un gran lector y una persona con buenos conocimientos generales, además mejorarás tu léxico y las personas querrán aprender mucho de ti.
